A LA H. JOSEFA GONZÁLEZ CORTÉS
Salamanca, 5 septiembre 1901 MF II 79. No autógrafa. Escrita por Joaquina Gómez y firmada por la M. Cándida
La aprobación definitiva del Instituto pide, por parte de todas la Hermanas, una actitud de humildad y agradecimiento al Señor. A esto las invita con insistencia la M. Fundadora, añadiendo una nota que la define netamente en sus rasgos peculiares: no puede ser una actitud pasiva; debe ir acompañada de una mayor exigencia de fidelidad en nuestra vida de consagración. Junto al gozo que experimenta por esta manifestación del amor del Padre, está también presente la pincelada del sufrimiento –enfermas grave, necesidades perentorias de personal en las casas, que no puede fácilmente remediar…‐. Y, ante las dificultades todas, su actitud de constante disponibilidad a la voluntad del Padre.