A LA H. ÁGUEDA REY GARCÍA
Tolosa, 30 marzo 1912 MF IV 156. No autógrafa. Escrita por María Igarategui y firmada por la M. Cándida.
Cerrando la alusión a algún trámite de tipo administrativo que en esos momentos se exige a determinados colegios, expresa la M. Fundadora su deseo de que en todas nuestras determinaciones y obras esté presente la luz del Señor para vivir siempre según su querer. Comparte también con las Hermanas de la comunidad de Bernardos las nuevas noticias que han llegado sobre las fundaciOnes del Brasil. Y, en su voluntad de vivir plenamente la espiritualidad ignaciana, aparece netamente marcado en la suya lo que desea sea el móvil primero en nuestro servicio al Señor: buscar su gloria. Junto con esta actitud de cara a Dios, se pone de manifiesto la dimensión mariana, tan presente en toda la vida de Cándida María de Jesús.